Restauración de cortas: La minería es patrimonio
En los últimos años se han recuperado seis cortas mineras abandonadas en la provincia de Huelva, reintegrándose en el entorno y acercándolas al ciudadano como alternativa de cultura y ocio Redacción.
La explotación de la riqueza minera en las comarcas onubenses de la Cuenca Minera y el Andévalo es una actividad constante desde la Edad Antigua; sin embargo, será la extracción del mineral a cielo abierto –iniciada en el siglo XIX– el hito decisivo para la transformación radical del terreno mediante la aparición de cortas y escombreras, dando lugar a un paisaje violento, pero sorprendente; degradado, pero atrayente; y que, sobre todo, nos habla sobre la capacidad destructora y creadora de la sociedad. Con la llegada de la Revolución Industrial, empezó la demanda masiva de materias primas como el cobre o el ácido sulfúrico, extraídas de un material muy abundante en la provincia: la pirita. De hecho, a comienzos de la pasada centuria, el 60% de la producción mundial de este mineral era de origen español. Esa demanda, unida a los avances tecnológicos, fue determinante para que se pasase de la minería subterránea a la construcción de grandes cortas a cielo abierto. Es la época de la calcinación (fundición de piritas en hornos al aire libre para la obtención de cobre) y de la deforestación, ocasionada por la gran cantidad de leña que requería este proceso. Pese a todo, esta actividad minera -mantenida en parte hasta finales del siglo XX– también ha legado a la comarca un importante patrimonio arquitectónico, compuesto de malacates, edificios, chimeneas, puentes, poblados mineros, canaleos, infraestructuras ferroviarias, y un largo etcétera. Por ese motivo, y con el propósito de poner en valor todo ese legado mediante su recuperación y adecuación de usos, la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia ha ejecutado un proyecto integral en seis cortas mineras construidas a mediados del siglo XIX: son las de San Telmo y Confesionarios, en Cortegana; Concepción, en Almonaster La Real; Tharsis, en Alosno; La Zarza, en Calañas; y Peña de Hierro, en Nerva. Un conjunto de infraestructuras que ha sido adecuado para su uso recreativo y cultural mediante la creación de senderos, mejorando los caminos de acceso a las mismas, la instauración de áreas de esparcimiento y la señalización orientativa. Además de estas actuaciones, que afectan primordialmente a las cortas y a su entorno, se ha llevado a efecto un segundo conjunto de actuaciones enfocadas hacia la interpretación del patrimonio, tales como la creación de maquetas, el desarrollo de señales específicas, la constitución de terminales con desarrollo multimedia o la publicación de materiales.
Ocio en las minas
Las obras efectuadas en este apartado facilitan la visita por zonas de alto valor histórico que antes eran inaccesibles debido a su alto grado de deterioro. Para ello, se ha procedido a vallar los caminos que bordean las cortas, evitándose el riesgo de caídas a distinto nivel, colocándose bancos y papeleras. También se han construido miradores en puntos estratégicos, así como zonas de descanso y merenderos con bancos y mesas de piedra natural de la zona. Otra de las actuaciones realizadas ha consistido en tapar los pozos y antiguos respiraderos de las minas, y en efectuar una revegetación del entorno con plantas autóctonas, compensando así el impacto que la actividad minera tuvo en los suelos. La especie elegida ha sido el pino piñonero (Pinus pinea), de crecimiento rápido y capaz de soportar la erosión. La adecuación de fuentes naturales, o la instalación de un pequeño museo al aire libre en Mina Concepción –donde el viandante puede contemplar maquinaria antigua y minerales-, son otras intervenciones realizadas.
Señalización
Esta intervención se ha realizado en dos grandes líneas: por una parte, se han colocado indicaciones orientativas, para que el usuario sepa llegar a las minas y qué precauciones adoptar durante la visita; por otra, existe un segundo grupo de señales que explican la historia, valores y curiosidades presentes en el rico patrimonio minero de la provincia.
Todo esto ha conllevado una fase previa de análisis que se ha compartido con los visitantes a través de estos soportes: una vez concluido el recorrido, el ciudadano obtiene una visión de conjunto sobre la historia, el patrimonio y la naturaleza presentes en cada uno de estos complejos mineros.
Dotación de maquetas
Otra de las intervenciones realizadas ha consistido en el desarrollo de seis maquetas topográficas –una por cada complejo- para personas con discapacidad visual grave y/o movilidad reducida. Se han ejecutado siguiendo una serie de pautas encaminadas a conseguir que la información pueda llegar simultáneamente a través de dos canales: la vista, y el tacto. Colores, formas, texturas y dimensiones se han tenido en cuenta para que la información recibida por los usuarios se ajuste fielmente a la realidad.
Actuación destacada: Depósitos de lodos de Almagrera
En el marco de actuaciones en espacios mineros abandonados, y con riesgo potencial de incidencias al medio ambiente, destacan las intervenciones que desde 2007 viene efectuando la Administración Minera Andaluza en los depósitos de estériles mineros de la mina de Almagrera (Calañas). Se trata de dos depósitos: un dique de cenizas de piritas, donde ya han concluido los trabajos, y un depósito de residuos de flotación, actualmente intervenido. Los trabajos, de corrección ambiental, han consistido en el desvío de aguas pluviales, para evitar que entren en contacto con el material contaminante, y en el posterior sellado de los diques mediante su impermeabilización. Tras ello, se ha procedido a revegetar toda la superficie. En conjunto, todos estos trabajos se están llevando a cabo sobre un terreno superior a las 60 hectáreas y en los que ya se han invertido más de 18 millones de euros.
Diario de Sevilla 31/05/2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario